Los inicios

Un joven de la ciudad de Kostromá dedica su vida a La Orquesta


Catedral de la Asunción
  Se trata del legendario Ilya Musin, originario de una ciudad de provincia del centro de la Rusia Europea llamada Kostromá. La gran ilusión del Joven Ilya era la pintura, sin embargo no pudo dedicarse a ella, su vida se va a encauzar por otros caminos en una completa dedicación a la música. Él mismo cuenta: " me gustaba mucho dibujar. Era mi talento. Pero mi padre quería hacer un músico de mí. Él me obligó a tocar el piano en contra de mi voluntad. Cada día se sentaba a mi lado en el piano mientras tocaba. Todos los días ".

Ilya Musin
 nunca había escuchado música hasta los 11 años en ningún pueblo. Aunque en los pueblos y en su ciudad se cantaba, no poseían ningún tipo de registro sonoro ( discos ) ni tan siquiera tenían radio. Había crecido en una ciudad donde la música de concierto no existía. Pero un día escuchó a alguien detrás de la pared tocando el piano, se trataba de " Eugene Onegin " la ópera de Pyotr Ilyich Tchaikovsky, le impresionó y empezó a buscar música. Después le dijo a su padre que quería estudiar en el conservatorio.

El joven Ilya tenía 16 años cuando por primera vez escuchó los mágicos sonidos de una Orquesta. Quedó asombrado. La música lo invadió.

A Mr. Musin le tocó vivir en una época difícil, eran años turbulentos para Rusia, pero fuera de las provincias había más seguridad, menos problemas y además él, inmerso en su música, escuchaba más a menudo el golpear de los tambores que el estruendo de los cañones. Según explica Musin: él nunca se dió cuenta de La revolución. Ésta no llegó a Kostromá.

El joven Ilya Musin  era un hombre modesto, lleno de alegría, calidez y afabilidad, parece ser que siguió siéndolo toda su vida.